viernes, 12 de febrero de 2010

Klimov's Come and See

Guerra.

Una palabra de dos silabas que sin embargo ha marcado la historia de la humanidad. Y es el caso que, el ser humano ha pasado la mayor parte de su existencia en guerra.

Guerras han habido muchas, pero solo una ha marcado el mundo como lo conocemos ahora. La segunda guerra mundial ha sido captada, documentada, explicada y hasta satirizada en diversas peliculas, sin embargo solo dos han logrado recrear fielmente el sufrimiento de los afligidos por ella. Solo dos han logrado desenmascarar los horrores de la guerra haciendonos sentirlos incluso desde el otro lado de la pantalla. Come and See de Ellen Klimov es una de ellas.

Muy al margen de las peliculas de Hollywood que narran acontecimientos de la guerra y de pasajes de supervivencia, existe un grupo de peliculas independientes que cuentan la historia desde el punto de vista de los vencidos. Las versiones comunes de la historia siempre son las impuestas por los vencedores, dejando en el olvido la cruda realidad que vivieron aquellos que no pudieron triunfar en la guerra. Muchas veces las atrocidades y masacres son cubiertas por versiones "necesarias" para justificar el salvajismo humano, salvajismo que, se encuentra presente en la memoria colectiva de todas las naciones oprimidas por cualquier guerra.

Come and See de Ellen Klimov cuenta la historia de un joven bilorruso llamado Florya - interpretado magistralmente por Aleksi Kravchenko - quien vive en carne propia los horrores de la segunda guerra mundial. Deseoso de servir a su pais y defenderlo con su vida, decide unirse al ejercito partisano. El titulo fue tomado del capitulo 6 del apocalipsis de Juan:


"Y cuando se abrio el cuarto sello, escuche la voz de la cuarta bestia decir "Ven y Mira" (Come and see) y yo mire y vi al caballo palido y su normbe era ... muerte y el infierno lo seguia, y se le dio poder sobre la cuarta parte de la tierra para matar con su espada"


La pelicula inicia con Florya buscando rifles abandonados para poder ser aceptado por el ejercito y servir a su patria, pese a la negativa de su madre Flyora parte, rifle en mano rumbo al sacrificio. En su segundo dia de viaje es abandonado por la tropa, cuyo general piensa que le hace un favor al dejarlo regresar a casa, pues es muy joven para morir. En su camino de regreso conoce a una chica llamada Glosha y los dos desarrollan un lazo inseparable muchas veces candido. Su tranquilo regreso a casa se ve perturbado por el bombardeo de aviones Blitz sobre el area en que ellos se encuentran. En una las escenas mas dramaticas de la pelicula, una bomba estalla cerca de Floyra dejandolo en un shock psicologico por el resto del film.

Desde este punto, la pelicula muestra diferentes zonas de bilorrusia, mostrando los efectos inmediatos y permanentes de la guerra, no solo en el pais, sino tambien en el protagonista. En cierto modo, Come and See se convierte en la pelicula mas cruda sobre la guerra que haya sido producida independientemente. El progreso de Florya es maravilloso, al comienzo esta siempre atento y dispuesto a entrar a la guerra para sevir a su pais; al final del film ha llegado a ver todas las atrocidades de la guerra y los resultados de esta de primera mano. La audiencia queda embargada con el sentimiento de Floyra lo que llega al climax cuando se le ve destruir una foto de Hitler.

La habilidad de la pelicula para transportarnos en la mente del protagonista es sorprendente, a traves del rol de Florya somos testigos de los mismos eventos que el presencia. El estilo de Klimov es basicamente la representacion real de los acontencimientos, teniendo un trabajo brillante al mostrarnos los horrores de la guerra a traves de los ojos de un niño.

Luego de la explosion, Flyora queda temporalmente sordo y luego de esconderse en el bosque por unos dias, retorna a su villa con Glasha, sin embargo no encuentra a su familia pero si a las muñecas de sus hermanas alineadas frente a la casa. Sin saber lo que ha pasado deciden sentarse en la mesa de la casa y comer la aun caliente comida del horno. Florya piensa que su familia debe estar escondida en una isla cruzando un pantano cercano. Mientras escapan de la villa, Glasha voltea y ve un grupo de cadaveres apilados detrás de la casa de Florya. Luego de un penoso recorrido en el pantano logran llegar a la isla, donde aun se encuentran algunos supervivientes, incluido un anciano al que el ejercito nazi le prendió fuego. Florya recién comprende que su familia no sobrevivió.

Sintiendose culpable por no haber estado presente para defender a su familia, se une a tres miembros de la resitencia quienes parten en busca de comida para los sobrevivientes; en el camino encuentran a la S.S. realizando actividades anti-partisanas y exterminando bielorrusos. El almacen de comida se encuentra bien protegido por lo que les es imposible robarla. Dos de los rebeldes mueren al atravesar un campo minado al que Flyora los condujo erróneamente. Finalmente Flyora y su único compañero logran robar una vaca de un granjero alemán colaborador de los Nazis pero en su escape la vaca y el compañero mueren.

La mañana al no poder mover la vaca Flyora intenta robar un caballo y una carreta para llevarlas a los sobrevivientes, el dueño de estos intenta disuadirlo, pero ambos se ven obligados a escapar juntos ante la llegada del ejercito Nazi. Este granjero ayuda a Flyora a esconder su rifle y su casaca de partisano y lo lleva a la villa de Perekhody para esconderlo. Los nazis llegan a la villa y obligan a todos los habitantes a entrar a la iglesia, la cual cierran desde fuera para que nadie escape. El oficial Nazi a cargo les comunica a los habitantes que todo aquel que quiera escapar podrá salir de la iglesia por una de sus ventanas, siempre que deje a sus hijos dentro de la iglesia. Nadie se mueve. Flyora es el primero en salir de la iglesia, seguido por una mujer quien intenta salir con su hijo recién nacido en brazos. Una vez fuera la mujer es arrastrada de los pelos hasta un camión del ejercito y el niño es lanzado nuevamente dentro de la iglesia a través de la ventana.






La verdadera masacre inicia. Los soldados nazis arrojan granadas dentro de la iglesia y le prenden fuego con lanzallamas. Mientras escuchan los gritos de los bielorrusos dentro quemándose vivos, los nazis rien y aplauden y se toman fotos con la iglesia en llamas. La mujer que logro escapar de la iglesia es lanzada dentro del camión al que fue conducida y violada por todo el ejercito.

Floyra es arrastrado por el oficial a cargo quien apunta un arma contra la cabeza del niño, mientras el fotógrafo oficial le toma una foto. Finalmente Flyora es dejado libre.

Mientras los nazis se retiran, un grupo de rebeldes partisanos llega a la villa y logra capturar a un pequeño grupo, incluido el oficial a cargo de la masacre y a un grupo de bielorruso que los apoyan. Florya lleva un galon de gasolina para quemar a los prisioneros. El colaborador Bielorruso se ofrece de interprete y luego de hacerle ver a sus captores que el fue obligado a realizar la masacre por los Nazis, traduce el sentir del comandante nazi, quien dice ser un buen hombre y dedicado abuelo, pidiendo respeto por su vida, otro oficial nazi, sin embargo, tacha al comandante de cobarde y prolifera que todos los bielorrusos son una raza inferior y simpatizantes del comunismo y que tarde o temprano serán exterminados. Los prisioneros son bañados en gasolina, pero sus captores deciden fusilarlos en lugar de prenderles fuego.

Mientras los partisanos se van del lugar de la masacre, Florya encuentra una foto de Adolf Hitler en el barro y le dispara. La película cobra un giro importante, diversas imágenes de la vida de Hitler son presentadas en reversa temporal, desde las masacres en los campos de concentración ante cada uno de ellas Florya dispara con ira... imaganes de Hitlers en el partido nazi, en la primera guerra mundial, de Hitler en el colegio… luego de cada una se oye un disparo con ira… hasta que finalmente la foto de Hitler bebe en brazos de su madre aparece… sin embargo Florya no dispara, sino que la mira con ternura… el sentido común y el amor familiar pueden mas que la ira que Florya siente ante quien fue el autor intelectual de la masacre de su país, su pueblo y su familia.

Al final Floyra se une al ejercito partisano y todos marchan a través del bosque en busca de sobrevivientes…

Ninguna otra obra ha sido capaz de contener el tono de la guerra como esta obra de Klimov. Desde la batalla de efectos visuales hasta los efectos sonoros aislados, la obra es tan real como la guerra misma… La película no fue hecha para entretener, sino para relatar, si eres capaz de soportar las imágenes de los horrores de la guerra que Klimov presenta, simplemente apagar el reproductor será imposible. Las oportunidades que puedas tener de haber escuchado sobre la existencia de esta obra son simplemente nulas… ninguna película, sin embargo, ha mantenido y representado los horrores de la guerra en la Ex unión soviética tan magistralmente como esta obra, los efectos visuales y el contenidos pueden ser demasiado crudos para casi todos los expectadores, sin embargo, parra aquellos interesados en la historia, el punto de vista de un niño cuyos sentimientos se van perdiendo ante la experiencia de tanto sufrimiento, es diferente a cualquier otra obra. Come and See es una obra diferente desde todos los aspectos, una verdadera obra de arte… si no la has visto y puedes conseguirla… date el gusto!

Nota: Fernando, gracias por mostrarme este pedazo de historia en la pantalla grande.